La FP no es una alternativa más. La FP es la opción de cualquier alumno o alumna que esté buscando una salida laboral en tan solo dos cursos académicos. En estos dos cursos, y a través de los distintos módulos que componen cada ciclo formativo, los estudiantes son capaces de integrarse en un centro de trabajo de la mano de unas competencias profesionales alcanzadas que le van a facilitar la inserción laboral en su sector profesional. La actitud, la seriedad, los modales, la iniciativa, la creatividad o la cultura, no están reñidas con esas competencias técnicas que aprovechamos y disfrutamos desde las aulas.
La Formación Profesional no es el último recurso. La Formación Profesional es la expresión del talento que muchos jóvenes materializan a través de cualquiera de los más de 150 ciclos formativos desde los que pueden emplear sus intereses personales y profesionales. La oferta formativa es numerosa y permite especializarse con un ciclo formativo de grado medio como Técnico/a o desde un ciclo de grado superior como Técnico/a Superior; existiendo además la posibilidad de transitar a otra etapa educativa diferente a la FP.
La FP no es todo práctica. La FP es fruto de la experiencia que el profesorado traslada a sus alumnos a través de multitud de métodos donde las habilidades profesionales se trabajan sin perder de vista la teoría para cada una de las técnicas y las destrezas para llevarlas a cabo. En FP se aprende desde las aulas, los talleres y desde los centros de trabajo, en un entorno real, donde ponen a prueba sus conocimientos y las competencias trabajadas. La FP supone una evaluación constante donde se valora el proceso de maduración profesional y no solo un examen teórico.
Los docentes de Formación Profesional no son iguales al resto. El profesorado de FP es, de hecho, el mayor activo de la Formación Profesional. Gracias al profesorado funciona una FP que, con recursos siempre limitados, ofrece una formación actualizada donde el centro de la enseñanza es el alumno. La vocación profesional del alumnado y de los docentes se conjugan perfectamente en esta etapa educativa; una actitud provechosa es una garantía para el éxito académico y profesional de unos alumnos que van a beneficiarse de la especialización de su profesorado.
La FP no es tan solo un título oficial. Con la FP también vas a poder amplificar tu currículum gracias a los programas de FP Dual que se ofrecen en muchas titulaciones; o desde una experiencia en el extranjero con prácticas en empresas internacionales facilitadas con una beca Erasmus+. Conocerás, en todos los ciclos, las posibilidades de empleo, los retos de la digitalización y cómo acceder al mundo del trabajo gracias a un módulo específico de formación y orientación laboral. La FP acredita tu aprendizaje desde la experiencia de cualquiera de los cientos de centros de Formación Profesional en España que llevan décadas preparando a jóvenes para que afronten su futuro con la mayor confianza. Tan solo tienes que preguntar a una antigua alumna o alumno de FP.
Gracias a la FP se han iniciado mucha vidas profesionales. Incluso, desde la FP, muchas personas han podido cambiar el rumbo a sus estudios o empleos a otras actividades más satisfactorias a nivel personal. La FP nos ha dado a muchos una forma de estar en el mundo; aprendiendo constantemente, tanto desde la parte técnica como de la humana, gracias a ese contacto constante con compañeros y alumnos que dotan de ese carácter especial que tiene nuestra Formación Profesional.
Artículo publicado en fpempresa.net el 1 de junio de 2020. Autor: Óscar Boluda Ivars. Profesor en la Escuela Profesional Xavier (Valencia) Twitter: @oscarboluda
